32 años de la muerte de Pablo Escobar Así cayó uno de los hombres más temidos de Colombia
El 2 de diciembre de 1993 podría considerarse fácilmente como el día más largo en la historia de Colombia. Aunque fue común y corriente de 24 horas, las versiones que existen de lo que pasó podría, p…
El 2 de diciembre de 1993 podría considerarse fácilmente como el día más largo en la historia de Colombia.
Aunque fue común y corriente de 24 horas, las versiones que existen de lo que pasó podría, perfectamente, sentirse como un relato de varias semanas por las múltiples historias que solo coinciden con un mismo final: murió Pablo Escobar.
La foto final del narcotraficante es todo lo contrario a lo que fue su auge como el capo más poderoso del país, Escobar murió solo, descalzo, vestía un jean y una camisa azul, y custodiado por un centenar de uniformados que rodeaban el sector, lejos estaba de ser el criminal que tanto atemorizó a una nación.
30 años después, observar las fotografías de miembros del Bloque de Búsqueda y la DEA celebrando junto al cuerpo lleno de sangre de Escobar, hace que la percepción de que la exhaustiva meta de encontrar al líder del cartel de Medellín no fue tan difícil, pero habría que volver tres años atrás para entender lo que representaba el capo.

El 2 de diciembre de 1993 se registró la muerte de Pablo Emilio Escobar Gaviria, líder del cartel de Medellín y uno de los capos más buscados de la historia de Colombia
11 de agosto de 1990: el inicio de la caída de Escobar
En toda película de ficción, un buen villano debe estar acompañado de un eficiente secuaz, eso era Gustavo Gaviria, alias El León, para Pablo Escobar. Popularmente, se dice que en los negocios la familia no ocupa un rol superior, pero juntos, los primos construyeron un emporio criminal en el que Pablo se robó todo el protagonismo.
Escobar era la cara visible del cartel de Medellín, pero Gustavo Gaviria era el encargado de las finanzas, el líder logístico y por fuera del narcotráfico, una de las personas más cercanas al temido capo, no por nada iniciaron juntos en el mundo criminal.
Se habla de que la fortuna de Gaviria era similar a la de su primo, y aunque de manera natural se afirme que propiedades como la Hacienda Nápoles eran de Escobar, en realidad la mitad era de El León, al que le gustaba tener un perfil más tranquilo. También se presume que no era tan violento como el líder del cartel de Medellín y fue una de las personas que más rechazó la inmersión de Pablo Escobar en la política, lo que hizo que su fachada de empresario terminara.

Gustavo Gaviria era el primo y principal socio de Pablo Escobar
Gustavo acompañó a su primo en sus inicios, en el auge como capos de la droga y en la guerra contra el Estado y el cartel de Cali. Juntos eran los criminales más buscados del país, aunque el aura de figura poderosa y cabecilla máximo de la organización la tuviera Pablo Escobar.
Durante más de una década fueron intocables, en gran parte de Medellín, Antioquia y Colombia, eran una autoridad mayor que el Estado, pero esto terminó para Gaviria el 11 de agosto de 1990.
Sobre las 4:00 p. m., un escuadrón del Bloque de Búsqueda llegó a la vivienda cubierta de vidrios blindados de Gustavo tras interceptar una de sus llamadas; fiel al estilo que representaba a los miembros del cartel de Medellín, Gaviria prefería una tumba en Colombia que una celda en Estados Unidos, por lo que murió al intentar enfrentarse con los uniformados.
La mano derecha de Escobar había caído, el cartel de Medellín no era intocable, y el líder de la organización había perdido a su primo y cómplice dentro del ámbito criminal.
Gustavo Gaviria solo tuvo un hijo, que compartía su mismo nombre; este fue asesinado el 2 de diciembre de 1993, y se especula (en una de las múltiples versiones que existen) que fue quien entregó la ubicación de Pablo Escobar tras ser torturado por Los Pepes.
Con la muerte de El León inició la caída de Escobar. Sin el Mexicano, con dos de los Ochoa colaborando con la justicia y gran parte de sus hombres cayendo poco a poco, aunque ya lo era, Pablo Escobar se consolidó como la cabeza principal y el objetivo máximo para terminar con el narcotráfico en Colombia.
El final de Pablo Escobar
El 2 de diciembre de 1993, sobre las 2:00 p. m. se registró la primera de múltiples llamadas de Escobar a su familia; durante poco menos de una hora, el capo olvidó una de sus principales reglas de supervivencia y utilizó el teléfono como nunca lo había hecho.
Por fuera del cuestionario, un día después de su cumpleaños, el narcotraficante pidió hablar con su esposa y su hija, de poco sirivió que le pidieran que no llamara más, y entre tantas conversaciones que sostuvo con su núcleo más cercano, la última fue con su hijo, Juan Pablo, que escuchó las últimas palabras de su padre, en las que le indicó que algo extraño estaba pasando.
Carrera 79B #45D-94, barrio Los Olivos, Medellín. Está es la dirección en la que se escondía Pablo Escobar en una casa de dos pisos. La fotografía final del capo lo muestra en el tejado de la casa de atrás, descalzo, con un jean y una camisa azul.
Se suicidó, fue dado de baja por Hugo Aguilar, lo mataron Los Pepes o un francotirador de la DEA. Teorías de ese momento existen bastantes, pero todas con un mismo final, así se registró la muerte de Pablo Emilio Escobar Gaviria.









