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El País

Faride Raful asegura que esta gestión es la que más ha deportado

En una rueda de prensa posterior a la reunión número 86 de la Fuerza de Tarea Conjunta, celebrada en la sede de la Policía Nacional, Raful destacó que estas cifras reflejan la “grave crisis humanitari…

Redacción Telenoticias • April 7, 2025 8:09 pm
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Santo Domingo. – La ministra de Interior y Policía, Faride Raful, informó este lunes que la actual gestión gubernamental ha realizado un total de 187,983 repatriaciones de migrantes irregulares desde octubre de 2024. De esa cifra, 93,357 han ocurrido en lo que va del presente año, lo que marca un récord histórico en la política migratoria dominicana.

En una rueda de prensa posterior a la reunión número 86 de la Fuerza de Tarea Conjunta, celebrada en la sede de la Policía Nacional, Raful destacó que estas cifras reflejan la “grave crisis humanitaria” que atraviesa Haití, un país vecino que se encuentra sumido en un “estado de caos”.

Un tema complejo: repatriaciones no celebradas

La ministra aclaró que, aunque las repatriaciones sean una medida que marca un hito en las políticas de seguridad del país, no deben ser motivo de celebración. “Esto no es un dato que deba llenarnos de orgullo. Preferimos un Haití estable, que no produzca inmigrantes. Pero mientras persista la inestabilidad, garantizaremos la seguridad de nuestra nación”, afirmó Raful, haciendo énfasis en la responsabilidad del gobierno dominicano de velar por la seguridad de los ciudadanos, aun cuando las condiciones del país vecino sigan siendo críticas.

Raful también resaltó que la situación migratoria ha sido complicada, pero que la República Dominicana continuará con sus esfuerzos para manejarla de manera responsable, respetando los derechos humanos, al mismo tiempo que se garantiza la protección de los intereses nacionales.

Un enfoque equilibrado ante una crisis regional

El mensaje de la ministra deja claro que, aunque las deportaciones sean una respuesta ante la crisis haitiana, el gobierno de República Dominicana no las considera un logro, sino más bien una consecuencia de la situación humanitaria y política que afecta al país vecino.