Lula da Silva destaca legado inmortal de Pepe Mujica tras su fallecimiento
Durante el velatorio realizado en el Palacio Legislativo de Montevideo, Lula recordó la vida de Mujica como un ejemplo de generosidad y valentía, destacando su paso por la cárcel durante 14 años sin a…
Montevideo. – El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, rindió homenaje este jueves a su amigo y exmandatario uruguayo José “Pepe” Mujica, fallecido el pasado martes a los 89 años, afirmando que “una persona como Pepe Mujica no se muere, sus ideas quedan”.
Durante el velatorio realizado en el Palacio Legislativo de Montevideo, Lula recordó la vida de Mujica como un ejemplo de generosidad y valentía, destacando su paso por la cárcel durante 14 años sin albergar odio hacia quienes lo encarcelaron y torturaron.
“Se fue su cuerpo, pero plantó sus ideas todos estos años, con la generosidad de un hombre que estuvo 14 años en cárcel y que consiguió salir en libertad sin ningún odio”, expresó Lula.
El presidente brasileño manifestó su profunda admiración por Mujica, a quien calificó como “una figura especial, cariñosa, que aprendí a respetar, admirar y seguir desde que asumió la Presidencia de Uruguay”.
También destacó la relación cercana que mantuvo con la esposa de Mujica, la exvicepresidenta Lucía Topolansky, y subrayó la competencia política y el carisma que Mujica tenía para conectar con los jóvenes.
Lula recordó además la reciente muerte del papa Francisco, señalando que ambos, Francisco y Mujica, ahora “cuidan desde el cielo” y envían bendiciones para una humanidad más fraternal y una política más digna y solidaria.
El mandatario brasileño estuvo acompañado por su esposa, Rosângela da Silva, y fue recibido por el presidente uruguayo, Yamandú Orsi. En el velatorio también estuvo presente el presidente chileno, Gabriel Boric.
En diciembre pasado, Lula visitó a Mujica en su chacra y le otorgó la Orden Nacional do Cruzeiro do Sul, la máxima condecoración brasileña para extranjeros, calificándolo entonces como “la persona más extraordinaria” entre los presidentes con quienes convivió.
La amistad entre Lula y Mujica trascendió diferencias políticas, consolidándose a lo largo de los años en una profunda relación personal y de respeto mutuo.
