Bukele defiende reelección indefinida y niega que sea “el fin de la democracia”
San Salvador. – El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, rechazó este domingo las críticas internacionales surgidas tras la aprobación de una reforma constitucional que permite la reelección presid…
San Salvador. – El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, rechazó este domingo las críticas internacionales surgidas tras la aprobación de una reforma constitucional que permite la reelección presidencial indefinida, al tiempo que acusó a sus detractores de juzgar al país por ser “pequeño y pobre”.
“Si esta decisión la hubiera tomado una nación rica y poderosa, nadie hablaría del fin de la democracia”, afirmó el mandatario a través de su cuenta oficial en redes sociales.
El pronunciamiento de Bukele llega días después de que la Asamblea Legislativa, controlada por el oficialismo, aprobara en un trámite exprés una reforma constitucional que extiende el mandato presidencial de cinco a seis años, elimina la segunda vuelta electoral y autoriza la reelección sin límite de períodos consecutivos.
Reforma acelerada y polémica
La votación en el Congreso, realizada el pasado jueves, ha sido duramente cuestionada por organizaciones defensoras de la democracia, tanto dentro como fuera del país, que advierten sobre un retroceso institucional y una concentración excesiva de poder en el Ejecutivo.
Desde 2021, el gobierno de Bukele ha sido señalado por la comunidad internacional por debilitar la independencia judicial y por la remoción de magistrados de la Corte Suprema, lo que abrió el camino a interpretaciones legales favorables a su reelección.
Reacciones internacionales
Diversos organismos y gobiernos han expresado preocupación por el rumbo democrático de El Salvador. La medida también ha sido criticada por organizaciones como Human Rights Watch y Amnistía Internacional, que han advertido sobre una posible deriva autoritaria.
A pesar de las críticas, Bukele sigue contando con altos niveles de popularidad entre la población salvadoreña, especialmente por su mano dura contra las pandillas y su discurso antiélite.