La tecnología digital, aliada para la salud cognitiva de los adultos mayores
Contrario a la percepción de que los dispositivos electrónicos perjudican la mente alimentada por estudios centrados en niños y adolescentes, la evidencia sugiere que, para mayores de 50 años, la tecn…
Un análisis reciente publicado en Nature Human Behavior concluye que el uso cotidiano de tecnología digital por parte de adultos mayores está vinculado con una mejor salud cognitiva y un menor riesgo de demencia. El estudio revisó 57 investigaciones que involucraron a más de 411.000 personas de edad promedio 69 años, y cerca del 90 % reportó un efecto protector sobre la función cerebral.
Contrario a la percepción de que los dispositivos electrónicos perjudican la mente alimentada por estudios centrados en niños y adolescentes, la evidencia sugiere que, para mayores de 50 años, la tecnología puede ser un estímulo mental beneficioso. El uso de ordenadores, teléfonos inteligentes e internet no solo mejora el rendimiento en pruebas cognitivas, sino que también se asocia con menores tasas de deterioro mental y demencia.
Los beneficios provendrían de la complejidad que implica manejar dispositivos digitales: resolver problemas, adaptarse a actualizaciones, aprender nuevas aplicaciones y realizar tareas cotidianas como compras en línea, gestiones bancarias o comunicación con familiares. Estas actividades favorecen tanto la agilidad mental como las habilidades funcionales y sociales.
Michael Scullin, neurocientífico y autor principal del análisis, explicó que “entre la generación pionera digital, el uso de tecnología cotidiana se ha asociado con menor riesgo de deterioro cognitivo y demencia”. Para Murali Doraiswamy, director del Programa de Trastornos Neurocognitivos en la Universidad de Duke, los hallazgos “son refrescantes y provocadores, y plantean una hipótesis que merece más investigación”.
El psicólogo Walter Boot añadió que el estudio refleja situaciones de la vida real, donde los adultos mayores deben adaptarse constantemente a un entorno digital cambiante, lo que podría explicar el efecto positivo observado.
La experiencia de Wanda Woods, de 67 años, refuerza esta idea. Su relación con la tecnología comenzó en la adolescencia, la llevó a trabajar con procesadores de texto en la Agencia de Protección Ambiental y, décadas después, a fundar un negocio de formación informática. Hoy, como instructora de Senior Planet en Denver, ayuda a otros adultos mayores a ganar confianza en el uso de herramientas digitales.