Londres inaugura el “Club del Grito” para liberar el estrés
La actividad, organizada por Mona Sharif, se llevó a cabo el sábado pasado en la cima de la colina, donde los participantes, en su mayoría personas de unos veinte años, esperaron a la señal de la orga…
En Hampstead Heath, un parque de Londres, decenas de jóvenes se reunieron recientemente para gritar juntos y liberar la tensión, en un fenómeno que rápidamente se volvió viral en TikTok.
La actividad, organizada por Mona Sharif, se llevó a cabo el sábado pasado en la cima de la colina, donde los participantes, en su mayoría personas de unos veinte años, esperaron a la señal de la organizadora para comenzar a gritar. “Fue terapéutico. Uno no se da cuenta de todo lo que se guarda hasta que lo deja salir”, comentó Rebekah Drakes, camarera de 23 años, tras su experiencia.
Sharif explica que la iniciativa está inspirada en la terapia de grupo y la terapia del grito, donde las personas expresan frustraciones que no pueden verbalizar. Los asistentes se grabaron con sus teléfonos mientras gritaban, observados por transeúntes divertidos o sorprendidos.
Un primer “Club del Grito” había atraído a mil personas en otro parque una semana antes. Mona Sharif relató que, tras ver videos de eventos similares en Estados Unidos, publicó un video sugiriendo hacer lo mismo en Londres y creó un chat grupal que reunió mil personas en apenas tres días.
La actividad incluye momentos de diálogo: antes de gritar, los jóvenes se suben a un banco y comparten sus sentimientos de soledad, dificultades para encontrar su lugar en la sociedad o frustraciones con las noticias, mientras el grupo los escucha y los anima.
Julia Dewit, profesora de 29 años, destacó la importancia de la participación femenina en la actividad, ya que a menudo se les enseña a mantener la calma y la serenidad, y señaló que los jóvenes se sienten más cómodos hablando de emociones y salud mental que los adultos.
Según una encuesta de YouGov para la Universidad UCL publicada en septiembre, dos tercios de los jóvenes británicos de 16 a 25 años han experimentado problemas de salud mental, relacionados principalmente con estudios o problemas económicos.
Además de servir como desahogo emocional, el Club del Grito permite a los jóvenes reunirse e intercambiar ideas en una ciudad donde muchas personas “se sienten solas y tienen dificultades para hacer amigos”, concluye Mona Sharif.
