Toma de posesión en Tanzania bajo la sombra de 150 muertos en comicios
Hassan fue declarada ganadora por la Comisión Electoral Nacional Independiente (INEC) con un abrumador 97.66 % de los votos, en unos comicios en los que quedaron excluidos sus dos principales contrinc…

En medio de fuertes tensiones políticas y un clima de duelo nacional, Samia Suluhu Hassan asumió este lunes la Presidencia de Tanzania durante una ceremonia oficial celebrada en Dodoma, la capital administrativa del país. La juramentación se produjo tras unas elecciones fuertemente cuestionadas, celebradas el pasado 29 de octubre, en las que se registraron protestas violentas que dejaron al menos 150 muertos.
Hassan fue declarada ganadora por la Comisión Electoral Nacional Independiente (INEC) con un abrumador 97.66 % de los votos, en unos comicios en los que quedaron excluidos sus dos principales contrincantes, lo que ha generado críticas sobre la transparencia del proceso.
El acto de investidura, realizado bajo estrictas medidas de seguridad y sin acceso al público, contó con la presencia de miembros del gobernante Partido de la Revolución (CCM), todos vestidos con el característico color verde de la organización, además de representantes diplomáticos y líderes africanos invitados.
Con este juramento, Samia Suluhu Hassan inicia un nuevo mandato de cinco años, enfrentando el reto de restaurar la confianza ciudadana y reconciliar un país dividido por la crisis política y la violencia postelectoral.
Entre los jefes de Estado que acudieron, bajo fuertes medidas de seguridad, estaban los presidentes de Burundi, Évariste Ndayishimiye; Zambia, Hakainde Hichilema; Mozambique, Daniel Chapo; y Somalia, Hassan Sheikh Mohamud; así como el vicepresidente de Kenia, Kithure Kindiki, entre otros dignatarios.
Durante la ceremonia, que se celebró en la base militar de Chamwino e incluyó un desfile de soldados, Hassan pasó revisión a las tropas, antes de subirse al podio desde el que realizó su juramento.
Mientras la presidenta tomaba posesión del cargo, la calma regresaba y la actividad se retomaba poco a poco en otros puntos del país, según pudo constatar EFE, tras las protestas que estallaron el miércoles, durante la jornada electoral, y se extendieron hasta el viernes.
Las marchas, motivadas por denuncias de fraude y represión durante el proceso electoral, sacudieron ciudades como la capital económica, Dar es Salam (este); Arusha (norte) o Mbeya (oeste).
Al menos 150 personas murieron en las manifestaciones desatadas en Dar es Salam desde las elecciones, reprimidas con dureza por la Policía, confirmaron a EFE el viernes fuentes sanitarias.
El opositor Partido de la Democracia y el Progreso (Chadema), en declaraciones a medios internacionales, cifró las víctimas mortales en unas 700, pero EFE no pudo verificar esos datos de manera independiente.
Chadema rechazó el sábado el triunfo de Hassan y afirmó en un comunicado que “estos resultados carecen de fundamento, ya que la verdad es que no se celebraron elecciones legítimas en Tanzania”, donde las autoridades también han bloqueado el acceso a internet.
A pesar de las críticas de la oposición y la preocupación expresada por organizaciones pro derechos humanos, la Unión Europea o la ONU sobre la violencia electoral, Hassan fue felicitada por cerca de diez líderes africanos, de momento, así como por la Unión Africana.
Esta fue la primera prueba en las urnas de la presidenta, que accedió a la Jefatura del Estado en 2021 por la repentina muerte de su antecesor, John Magufuli, de quien era vicepresidenta.
Hasan compitió con 16 candidatos presidenciales, pero faltaron los dos principales opositores: Tundu Lissu, líder de Chadema, en prisión preventiva desde su arresto en abril pasado y acusado de traición (delito que puede conllevar la pena de muerte), y Luhaga Mpina, de la Alianza para el Cambio y la Transparencia (ACT-Wazalendo), cuya candidatura fue rechazada por las autoridades. EFE









