Adolescente australiana protege a niños durante ataque en Bondi y resulta herida
Dadon relató que, al iniciarse el tiroteo, se refugió debajo de un banco, pero al percatarse de que dos niños habían quedado expuestos junto a sus padres heridos, decidió salir de su escondite.
Chaya Dadon, una adolescente australiana de 14 años que resultó herida mientras protegía a varios niños durante el ataque armado ocurrido en Bondi Beach, rechazó ser catalogada como heroína y aseguró que actuó movida por el instinto y la fe.
“Si pudiera renunciar a mi vida para salvar a esos niños, eso es lo que iba a hacer”, expresó la joven, quien se encontraba en la playa cuando dos hombres armados abrieron fuego contra cientos de personas que celebraban Hanukkah el pasado domingo.
Dadon relató que, al iniciarse el tiroteo, se refugió debajo de un banco, pero al percatarse de que dos niños habían quedado expuestos junto a sus padres heridos, decidió salir de su escondite.
“Salí de debajo del banco, tomé a los niños de sus madres, salté sobre ellos, los abracé y recé el Shemá. No sabían qué era, así que les dije: ‘Repitan conmigo’. Sentí que estábamos rodeados de amor en medio de un campo de odio, y que debíamos ser luz en esa oscuridad”, contó.
La adolescente explicó que cubrió los cuerpos de los niños con el suyo mientras continuaban los disparos. En medio del ataque, recibió un impacto de bala en el muslo, pero aun así siguió protegiéndolos mientras rezaba en voz alta.
“Los disparos seguían y seguían, y nosotros repetíamos Shemá Israel. En ese momento nos sentimos realmente conectados con Dios”, relató.
Dadon permaneció cuatro días hospitalizada en el Hospital Infantil de Sídney y fue dada de alta el jueves. Actualmente se desplaza con muletas, las cuales ha decorado con pegatinas en memoria de algunas de las víctimas mortales.
“Fui operada y, gracias a Dios, todo salió bien. Me sacaron la bala y ahora estoy viviendo mi vida al máximo por las personas que no pudieron hacerlo. Estoy transformando todo ese trauma en fuerza, para ser luz para quienes ya no pueden”, expresó.
El ataque, que las autoridades australianas calificaron como acto terrorista, dejó 15 personas fallecidas y decenas de heridos, convirtiéndose en el peor tiroteo masivo registrado en Australia en casi tres décadas.
La policía informó que el atentado, presuntamente inspirado por el Estado Islámico, fue perpetrado por Sajid Akram, de 50 años, y su hijo Naveed Akram, de 24. Sajid murió abatido por la policía en el lugar, mientras que Naveed fue arrestado y enfrenta 59 cargos, entre ellos asesinato y terrorismo.
