Nueva terapia disponible en Argentina abre esperanza en el tratamiento del cáncer de ovario
Por su parte, la doctora Ana Laura Mendaña, del Instituto Alexander Fleming, destacó que los avances en la caracterización genética permiten adaptar los tratamientos a cada paciente, aunque persisten …
Una nueva terapia disponible en Argentina abre un escenario alentador para el tratamiento del cáncer de ovario, una enfermedad caracterizada por el crecimiento descontrolado de células en los ovarios, órganos responsables de la producción de óvulos y de las hormonas estrógeno y progesterona.
De acuerdo con la Mayo Clinic, el cáncer de ovario suele diagnosticarse en etapas avanzadas, lo que reduce considerablemente las posibilidades de curación. Esta realidad se repite tanto en Argentina como a nivel mundial, debido a la ausencia de métodos de detección temprana efectivos y a que los síntomas iniciales suelen ser inespecíficos, como distensión abdominal, molestias digestivas persistentes, dolor pélvico o sensación de saciedad precoz.
En este contexto, especialistas destacan la incorporación de un anticuerpo conjugado a droga, una innovación terapéutica dirigida a pacientes cuyos tumores no responden a los tratamientos tradicionales basados en platino. Este medicamento actúa de manera precisa sobre el receptor de folato alfa, una proteína presente en la superficie de ciertas células tumorales, permitiendo liberar el agente quimioterápico directamente dentro de la célula cancerosa, lo que aumenta la eficacia del tratamiento y reduce el daño a los tejidos sanos.
Según datos de la Fundación Donde Quiero Estar (FDQE), el 65 % de los casos de cáncer de ovario se detectan en etapas avanzadas tras la consulta por síntomas, y el tiempo promedio entre la primera consulta y el inicio del tratamiento puede alcanzar los 172 días, lo que impacta negativamente en el pronóstico.
La doctora Valeria Cáceres, oncóloga del Instituto de Oncología Ángel H. Roffo de la Universidad de Buenos Aires, explicó que esta estrategia representa un cambio de paradigma:
“Mientras la quimioterapia convencional actúa de forma sistémica y poco específica, estas terapias permiten focalizar el tratamiento en tumores que expresan determinados biomarcadores. Por eso, el testeo molecular resulta hoy indispensable para optimizar los resultados clínicos”.
Ensayos clínicos internacionales recientes demostraron que esta nueva modalidad mejora la sobrevida y el control del cáncer de ovario resistente al platino, marcando un avance significativo para un grupo de pacientes que hasta ahora contaba con opciones limitadas.
Por su parte, la doctora Ana Laura Mendaña, del Instituto Alexander Fleming, destacó que los avances en la caracterización genética permiten adaptar los tratamientos a cada paciente, aunque persisten desafíos relacionados con la equidad en el acceso al diagnóstico molecular y a las terapias innovadoras.
Especialistas coinciden en que el abordaje del cáncer de ovario debe ser integral, incorporando apoyo nutricional, psicológico y social, además de cuidados paliativos cuando sea necesario. En ese sentido, organizaciones de la sociedad civil desempeñan un rol clave en el acompañamiento de las pacientes y sus familias.
Finalmente, María de San Martín, directora ejecutiva de la FDQE, subrayó que, ante la falta de métodos de prevención o detección temprana, la información y el acceso oportuno a equipos especializados siguen siendo herramientas fundamentales para mejorar el pronóstico y la calidad de vida de las pacientes.
