Bad Bunny denuncia las desigualdades sociales que afronta Puerto Rico en su nuevo videoclip
Si bien la producción comienza con extractos de su tema musical, luego cambia el tono y se convierte en un documental titulado ‘Aquí vive gente’, elaborado por la periodista boricua Bianca Graulau, que trata las problemáticas de los apagones, la gentrificación, la evasión de impuestos y la privatización de las playas.
El rapero puertorriqueño Bad Bunny lanzó la semana pasada un nuevo videoclip para su canción ‘El Apagón’, que en realidad es un documental de 23 minutos en el que denuncia las desigualdades sociales en la isla y critica a las autoridades por su inacción para combatirlas.
Si bien la producción comienza con extractos de su tema musical, luego cambia el tono y se convierte en un documental titulado ‘Aquí vive gente’, elaborado por la periodista boricua Bianca Graulau, que trata las problemáticas de los apagones, la gentrificación, la evasión de impuestos y la privatización de las playas.
El primer abordaje corresponde a los apagones que sufre constantemente el territorio desde septiembre de 2017, cuando el huracán María dañó severamente la infraestructura eléctrica. A partir de ese episodio el gobierno local firmó un contrato por 15 años con la empresa privada de capitales norteamericanos y canadienses Luma Energy. Lejos de mejorar la situación, las interrupciones de suministro continuaron y las facturas aumentaron constantemente.
Otro de las cuestiones que denuncia el rapero es el desplazamiento de los habitantes de barrios pobres de la capital San Juan, quienes se han visto forzados a dejar sus viviendas ante la especulación inmobiliaria, un fenómeno mundial que se da en ciudades turísticas conocido como ‘gentrificación’.
En el video se puntualiza el caso del barrio Puertas de Tierra, una zona que históricamente albergó viviendas populares pero que tiene una posición altamente deseada al estar próxima al casco histórico de la capital. “Yo viví 54 años en esa esquina, ahora hay un caserío nuevo para riquitos, y no puedo entrar. Como somos negros y pobres están abusando de nosotros, no es justo ser desplazados”, explicó un vecino.
Posteriormente, se hace mención a la evasión impositiva que es impulsada por la denominada Ley 22, que ofrece exenciones fiscales a inversores extranjeros que quieran mudarse a la isla. El documental da cuenta que muchos de los beneficiarios de esa normativa compraron residencias populares y hasta una antigua escuela abandonada para transformarlas en hoteles y apartamentos para turistas.