La Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA, por sus siglas en inglés) ha ordenado la inmovilización temporal de determinados aviones Boeing 737 MAX 9 operados por aerolíneas estadounidenses o en su territorio, un día después de que la despresurización de un panel de cabina en un avión de Alaska Airlines obligara a realizar un aterrizaje de emergencia, según lo ha expuesto la entidad un comunicado oficial.
Mike Whitaker, administrador de la FAA, declaró que han solicitado inspecciones inmediatas de ciertos aviones Boeing 737 MAX 9 antes de que puedan volver a volar. «La seguridad seguirá impulsando nuestra toma de decisiones, mientras ayudamos a la investigación de la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte sobre el vuelo 1282 de Alaska Airlines», aseguró Whitaker.
Asimismo, se publicará una Directiva de Aeronavegabilidad de emergencia que obligará a los operadores a inspeccionar antes de volver a volar las aeronaves que no cumplan los ciclos de inspección especificados en la directiva. Dichas inspecciones durarán entre cuatro y ocho horas por aeronave y afectarán a unos 171 aviones en todo el mundo.