Esto es lo que el trabajo remoto podría hacerle a nuestros cuerpos
Anna, un modelo 3D creado recientemente por la empresa de muebles Furniture@Work, del Reino Unido, con base en estudios científicos, muestra los cambios físicos y mentales de una persona del futuro expuesta al uso constante de computadoras portátiles y teléfonos inteligentes, una mala postura, y dieta poco saludable.
Un impactante modelo 3D reveló los efectos secundarios que tendría el trabajo a distancia en el cuerpo humano. Si bien esta práctica laboral tuvo su auge a raíz de la pandemia del covid-19, continúa siendo la forma de operar de varios empleados.
Anna, un modelo 3D creado recientemente por la empresa de muebles Furniture@Work, del Reino Unido, con base en estudios científicos, muestra los cambios físicos y mentales de una persona del futuro expuesta al uso constante de computadoras portátiles y teléfonos inteligentes, una mala postura, y dieta poco saludable.
Como se ve en la representación, uno de los principales efectos secundarios del trabajo remoto es el desarrollo de una espalda encorvada causada por años de tensión en el cuello y la espalda debido al trabajo desde lugares incomodos como la cama o el sofá. “La falta de movimiento regular y las ineficiencias ergonómicas pueden provocar trastornos musculoesquelético”, afirmó el cirujano ortopédico LS Wang, citado por los autores del estudio.
Otra consecuencia es la presencia de ojos rojos o llorosos, al estarse expuesto a tantas horas en la pantalla en un entorno que no está diseñado para largos periodos de trabajo. “Sin suficiente luz natural o las luces brillantes que se proporcionan en las oficinas comerciales, los trabajadores remotos ejercerán una tensión adicional en sus ojos, lo que podría provocar dolores de cabeza”, observa la investigación.
El siguiente efecto que se expone son las manos en forma de ‘garras’ a partir del tecleo excesivo en posiciones incómodas, en referencia a los calambres en los dedos y los músculos doloridos después de realizar continuamente actividades de motricidad fina.
Por otra parte, se menciona el aumento de peso a causa del estilo de vida sedentario. De acuerdo a la publicación, si bien el trabajo remoto le ha ahorrado al empleado el tiempo que se tarda en trasladarse a la oficina, también le ha quitado actividades físicas propias de aquel entorno, como caminar entre salas y moverse del escritorio.