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El Mundo

Exagente del Servicio Secreto de EE.UU. revela nuevos detalles del asesinato de John F. Kennedy

En aquel momento, la comisión afirmó que una de las balas disparadas alcanzó al presidente por detrás, salió por la parte delantera de su garganta y alcanzó a Connally. Se llegó a esa conclusión ya qu…

Redacción Telenoticias • September 10, 2023 5:32 pm
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El testimonio de un antiguo agente del Servicio Secreto de EE.UU. que estaba cerca del presidente John F. Kennedy cuando fue asesinado hace casi 60 años puede poner en duda la versión oficial de que solo Lee Harvey Oswald disparó al exlíder estadounidense. En una entrevista concedida a The New York Times, Paul Landis, cuyo libro ‘The Final Witness’ (‘El último testigo’) se publicará el 10 de octubre, reveló lo que recuerda del día de la tragedia.

De acuerdo con Landis, de 88 años, si sus recuerdos son correctos, la teoría de la ‘bala mágica’, a la que llegó la Comisión Warren, encargada de la investigación del asesinato, es errónea y hubo más de un tirador en Dallas el 22 de noviembre de 1963. Cabe recordar que, según la versión oficial, una de las balas disparadas contra la limusina de Kennedy no solo le alcanzó a él, sino también al entonces gobernador de Texas, John B. Connally Jr.

En aquel momento, la comisión afirmó que una de las balas disparadas alcanzó al presidente por detrás, salió por la parte delantera de su garganta y alcanzó a Connally. Se llegó a esa conclusión ya que los investigadores encontraron la bala de 6,5 mm en la camilla en la que se cree que estaba Connelly cuando fue trasladado al hospital y supusieron que había salido de su cuerpo.

Al mismo tiempo, según Landis, que nunca fue interrogado por la Comisión Warren, fue él quien encontró el proyectil. Y lo más interesante es que lo encontró en el coche presidencial, atascado en el respaldo del asiento en el que Kennedy estaba sentado.

“No había nadie allí para controlar el lugar de los hechos, y eso fue una gran, gran molestia para mí. Todos los agentes que estaban allí se centraban en el presidente. Todo estaba sucediendo muy rápidamente. Y yo simplemente tenía miedo de que… fuera una prueba, de lo que me di cuenta de inmediato. Muy importante. Y no quería que desapareciera o se perdiera”, explicó.