«La tormenta es increíblemente peligrosa. Deben obedecer las alertas e instrucciones de los responsables de emergencias. No den nada por sentado. Sigan su opinión, no la de ustedes. Evacuen en cuanto les digan. Estén preparados. La amenaza es real», dijo el mandatario en la apertura de una conferencia sobre hambre y nutrición.
El huracán Ian, reforzado con vientos de 155 millas por hora (250 kilómetros/hora), correspondientes a la categoría 4 (de 5), se acerca este miércoles a la costa oeste de Florida a una velocidad de 9 millas (15 kilómetros), que se reducirá antes de tocar tierra.
«He dejado claro al gobernador y a los alcaldes que el Gobierno federal está preparado para ayudar en todo lo que sea posible», añadió el presidente demócrata.
La Agencia Federal para el Manejo de Emergencias (FEMA, en inglés) de EE.UU. ha suministrado ya, según Biden, millones de litros de agua y menús, además de cientos de generadores a Florida.
El presidente pidió al sector petrolero que no utilice la situación como excusa para subir los precios de la gasolina o del gas, aunque su producción haya podido verse afectada a corto plazo debido al ciclón.
«No intenten usar esta tormenta para incrementar los precios. (…) La industria debería hacer lo correcto», recalcó en su discurso.