Legisladores de distintas bancadas en el Congreso Nacional expresaron su apoyo al canciller Roberto Álvarez, quien enfrentó con firmeza las acusaciones de las autoridades haitianas en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) respecto a la solicitud de detener las repatriaciones masivas.
Los parlamentarios respondieron enérgicamente a la diplomacia haitiana, que acudió a la ONU para denunciar que, en el proceso de reparaciones de sus nacionales, se están violando los derechos humanos. Y recordaron que no se permitirá el desorden que afecta a Haití en la República Dominicana.
A pesar del apoyo hacia Roberto Álvarez por defender con gallardía la soberanía del país frente a los ataques de los diplomáticos haitianos en la ONU, algunos congresistas hicieron un llamado a la comunidad internacional para que deje en paz a la República Dominicana en este asunto.
Sin embargo hay congresistas que entienden que el proceso de las deportaciones debe continuar respetando los derechos humanos de las personas.
El ministro Roberto Álvarez fundamentó la postura dominicana al resaltar el impacto económico que representan los ciudadanos haitianos, mencionando que actualmente hay 147,000 estudiantes haitianos en las escuelas del país y que se destina el 16% del presupuesto de Salud Pública a su atención.
Por Roberto Brito