Luego del magnicidio del presidente DE Haití, Juvenil Jovenel Moïse, la comunidad internacional debe  auspiciar un diálogo sincero con la integración de los partidos políticos, empresarios y el movimiento social, con la intención de impulsar la  reconstrucción moral de esa nación. Como nos cuenta Roberto Brito la propuesta es del politólogo haitiano Joseph Harold, quien indicó que este proceso debe ser prioridad ante las posibles elecciones en esa nación.

.Josep Harold, explicó que la reconstrucción de Haití incluye un conjunto de reformas estructurales en las áreas de la educación, salud pública, economía, además una reforma agraria, así como un amplio programa de  construcción de vías de comunicación terrestre que incentive la creación de empleos.

Sobre la hipótesis de que la primera dama, Martine Moïse,  Podría aspirar a la presidencia, dijo que sin un acuerdo entre las fuerzas vivas, ningún mesías solitario  va sacar de la crisis política al  país más pobre del hemisferio.

Dijo que con la miseria del vecino no se puede hablar de democracia, en este momento lo que se necesita  con urgencia es  una reingeniería  política social y económica.