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Economía

Nada cambia si tú no cambias: mentalidad y dinero rumbo al nuevo año

A medida que se acerca el final del año, muchos hacemos balances: cuánto logramos, qué se nos quedó pendiente, qué podríamos haber hecho mejor. Pero pocas veces miramos más allá de los números. La ver…

Redacción Telenoticias • November 14, 2025 11:12 am
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A medida que se acerca el final del año, muchos hacemos balances: cuánto logramos, qué se nos quedó pendiente, qué podríamos haber hecho mejor. Pero pocas veces miramos más allá de los números. La verdadera transformación financiera no empieza en la cuenta bancaria, sino en la mente.

El dinero, al final, es un reflejo de nuestras decisiones, y nuestras decisiones responden a nuestros pensamientos. Si tu forma de pensar sobre el dinero no cambia, tus resultados tampoco lo harán. Por eso, entrar a un nuevo año con la misma mentalidad del anterior es como esperar que un barco llegue a un destino distinto sin cambiar el rumbo.

Las creencias que nos limitan

Desde pequeños escuchamos frases que se quedan grabadas y moldean nuestra relación con el dinero:

“El dinero no crece en los árboles.”

“Ahorrar es para los ricos.”

“Si gano más, gasto más.”

“Eso no es para mí.”

Cada una de esas ideas actúa como una barrera invisible. Te lleva a sabotearte sin darte cuenta: postergas decisiones, dudas de tus capacidades o te convences de que “no puedes”. Y lo cierto es que muchas veces sí puedes, pero no te lo crees.

El primer paso hacia la libertad financiera es cuestionar tus creencias. Pregúntate: ¿de dónde viene esta idea?, ¿me está ayudando o frenando?, ¿qué pasaría si pensara distinto? Cambiar la mentalidad no es un acto de motivación pasajera; es un proceso de reeducación interna.

Hábitos, no solo deseos

Cada diciembre repetimos los mismos propósitos: “el próximo año ahorraré”, “voy a salir de deudas”, “quiero invertir”. Pero los resultados no cambian porque seguimos con los mismos hábitos que nos mantienen en el mismo lugar.

La clave no está en hacer promesas grandes, sino en construir hábitos pequeños, sostenibles y consistentes.

  • Si no puedes ahorrar RD$5,000 al mes, empieza con RD$500.
  • Si nunca llevas control de tus gastos, anota solo tres al día.
  • Si nunca lees sobre finanzas, dedica cinco minutos diarios a aprender algo nuevo.

El progreso no se mide en saltos, sino en constancia. Quien entiende esto transforma su mentalidad de “todo o nada” en “poco a poco pero constante”.

La importancia del entorno mental

Tu entorno influye tanto como tus ingresos. Si te rodeas de personas que viven endeudadas o que se burlan de quien planifica, será difícil mantener un rumbo diferente. Rodéate de quienes te inspiren a crecer, incluso si es a través de libros, podcasts o comunidades digitales. La energía que consumes define la dirección de tus decisiones.

 

De igual forma, habla distinto sobre el dinero. No digas “nunca puedo ahorrar”, di “estoy aprendiendo a organizar mis finanzas”. No digas “soy malo con el dinero”, di “estoy mejorando mi relación con el dinero”. Las palabras crean realidades.

Cierre de año con propósito

Antes de pensar en nuevos objetivos, haz una pausa y reflexiona:

  1. ¿Qué hábitos financieros me han funcionado este año?
  2. ¿Qué decisiones me alejaron de mi estabilidad?
  3. ¿Qué tipo de persona necesito ser para alcanzar mis metas el próximo año?

No se trata solo de planificar un nuevo presupuesto, sino de convertirte en alguien que actúa diferente con el dinero. Las herramientas y estrategias son útiles, pero el cambio real comienza en la mentalidad.

Cuando transformas tu pensamiento, tus decisiones cambian. Y cuando tus decisiones cambian, tus resultados también.

El nuevo año no traerá nada distinto si tú sigues siendo el mismo. No se trata de suerte ni de ingresos, sino de visión, disciplina y autoconfianza.

El mejor plan financiero que puedes trazar para el próximo año no empieza con una calculadora, sino con una decisión: pensar diferente para vivir diferente.