En medio de la preocupación mundial por el aumento de casos y muertes de COVID-19 producidas por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2, una epidemia amenaza con instalarse en el mundo.
El Ministerio de Agricultura de China confirmó el miércoles un brote de la cepa H5N8 de influenza aviaria en una bandada de aves salvajes en humedales de la reserva natural de Nagqu, en el Tíbet. El patógeno ha provocado brotes letales en millones de aves en medio mundo.
Pero este virus no es nuevo. Lleva circulando por Europa desde 2014, causando brotes que han afectado a millones de aves silvestres y de corral, según la agencia europea dedicada al control de las enfermedades infecciosas, el ECDC.
Pero la gran preocupación pasa por el reciente contagio provocado a siete personas hasta ahora, es decir el salto de infección entre especies. El 20 de febrero de 2021, Rusia alertó de que el virus había dado por primera vez el salto a humanos cuando siete trabajadores se infectaron en una gigantesca granja con 900.000 gallinas ponedoras en la región de Astracán, en el sur del país. Los médicos asistentes confirmaron que ninguno de los siete tuvo síntomas.
Dos científicos chinos, George Fu Gao y Weifeng Shi, publicaron este jueves un estudio científico en la revista Science alertando que tras el COVID puede llegar otra pandemia, como ocurre siempre desde hace milenios. Y los investigadores señalan a un sospechoso: el virus de la gripe aviar H5N8.
“La información sobre el primer caso registrado en el mundo de transmisión de la gripe aviar (H5N8) al ser humano ya ha sido enviada a la Organización Mundial de la Salud”, explicó Anna Popova, responsable de la agencia sanitaria rusa, Rospotrebnadzor, y agregó que las siete personas contaminadas en una granja de aves “se encuentran bien”.
“No se transmite de persona a persona. Pero solo el tiempo dirá qué tan pronto las mutaciones futuras le permitirán superar esta barrera”, agregó Popova. El descubrimiento de esta cepa ahora “nos da a todos, al mundo entero, tiempo para prepararnos para posibles mutaciones y la posibilidad de reaccionar de manera oportuna y desarrollar sistemas de prueba y vacunas”, añadió.