Se cumplen hoy 62 años del ajusticiamiento de Trujillo
La noche del 30 de mayo de 1961 Modesto Díaz, Salvador Estrella Sadhalá, Antonio de la Maza, Amado García Guerrero, Manuel (Tunti), Cáceres Michel, Juan Tomás Díaz, Roberto Pastoriza, Luis Amiama Tio, Antonio Imbert Barrera, Pedro Livio Cedeño y Huáscar Tejeda le dieron punto final a su planeada emboscada y en el kilómetro 9 de la carretera de Santo Domingo a San Cristóbal, interceptaron el auto en el que viajaba Rafael Leónidas Trujillo Molina, quien a ese momento llevaba 31 años con el control del Gobierno dominicano de manera dictatorial.
La noche del 30 de mayo de 1961 Modesto Díaz, Salvador Estrella Sadhalá, Antonio de la Maza, Amado García Guerrero, Manuel (Tunti), Cáceres Michel, Juan Tomás Díaz, Roberto Pastoriza, Luis Amiama Tio, Antonio Imbert Barrera, Pedro Livio Cedeño y Huáscar Tejeda le dieron punto final a su planeada emboscada y en el kilómetro 9 de la carretera de Santo Domingo a San Cristóbal, interceptaron el auto en el que viajaba Rafael Leónidas Trujillo Molina, quien a ese momento llevaba 31 años con el control del Gobierno dominicano de manera dictatorial.
A lo largo de esos años, «El Jefe» fue protagonista de múltiples hechos que a menudo llamaban la atención de la comunidad internacional, siendo uno de ellos la llamada “Matanza del Perejil”, en dónde asesinó entre 15,000 y 20,000 haitianos bajo la excusa de solucionar los problemas de la «migración ilegal».
Siendo otra ocasión el secuestro y posterior asesinato del escritor Español Jesús Galindez, quien un vez establecido en Nueva York, tras trabajar con Trujillo, comenzó a atacar al régimen del tirano; mientras que ya casi al final de su dictadura, ordenó colocar una bomba en el coche del presidente venezolano Romulo Betancourt, quien había colaborado con la Organización de los Estados Americanos (OEA) en planes de sacarlo del poder.
Sin embargo, ninguna de esas situaciones disparó el alarmismo en el país, y no fue hasta el asesinato de las hermanas Mirabal, Patria, Minerva y María Teresa, asesinadas junto a Rufino de la Cruz, que la dictadura comenzó a perder «poder».