El juez Bienvenido Liz, de la Oficina Judicial de Atención Permanente de Santiago, impuso prisión preventiva como medida de coerción en contra Kelvin Antonio Peña, quien prometió un contrato de trabajo en el extranjero a unos 15 querellantes.
El juez Bienvenido Liz, de la Oficina Judicial de Atención Permanente de Santiago, impuso prisión preventiva como medida de coerción en contra Kelvin Antonio Peña, quien prometió un contrato de trabajo en el extranjero a unos 15 querellantes.