A los 30 años, la joven exitosa abogada Lísia Daniella Lustoza Ferro sufrió un ataque isquémico transitorio (AIT). Luego, dos accidentes cerebrovasculares isquémicos (ACV). Permaneció en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) durante 25 días, comunicándose solo con los ojos, parpadeando, ya que el resto de su cuerpo quedó completamente paralizado.