El nuevo requisito entra en vigencia el 3 de noviembre.
Esta nueva exigencia es la última medida tomada por la administración que puede dificultar que las personas, particularmente aquellas sin medios financieros, emigren a Estados Unidos
En la proclamación firmada, Trump asegura que “los hospitales y otros proveedores a menudo administran atención a los no asegurados sin ninguna esperanza de recibir un reembolso de ellos” y que los costos que estas atenciones generan “se transfieren al pueblo estadounidense en forma de impuestos más altos, primas más altas y tarifas más altas por servicios médicos”.